Las bolas de cristal, además de para adivinar el futuro, tienen utilidades en el mundo de la iluminación. Una bola de cristal es, normalmente, una esfera fabricada en ese material que sirve para cubrir una bombilla. Al cubrir la bombilla, cuando esta se enciende se crea un efecto de difusión de la luz que suaviza el efecto de la bombilla a la vez que reparte la intensidad de luz de forma equitativa hacia todos los ángulos. Aquí puedes ver todas las bolas de cristal de nuestra tienda online

Las bolas de cristal son uno de los accesorios que más solicitados están, ya que son muy propensas a romperse, por ejemplo, durante el mantenimiento o limpieza de nuestras lámparas. Una lámpara con una bola de cristal rota, se desmerece y pierde todo su encanto, así como su funcionalidad.

Existen muchos tipos de bolas de cristal para lámparas. Por ejemplo, según su encaje, las bolas se dividen en:

1- Bolas de cristal sin cuello o bolas sin greipa: son bolas que en la parte de la boca tienen una rebaba lisa. Para sujetarlas son necesarios muelles de expansión

2- Bolas de cristal con cuello o bolas con greipa, que son bolas con un saliente pronunciado en la parte de la boca. Para sujetarlas hacen falta portabolas o portapiñas, que son unos soportes que incluyen tornillos laterales de presión

Las bolas también pueden clasificarse según su acabado y tipo de superficie:

1- Bolas de cristal opacas, opales o blancas, que son las clásicas bolas y las más frecuentes. Son las que mejor difunden y distribuyen la luz

2- Bolas de cristal transparentes, que pueden ser de cristal limpio o de cristal de colores. Estas bolas son muy bonitas estéticamente, pero hemos de tener cuidado con el deslumbramiento de la bombilla

3- Bolas de cristal grabadas, esmeriladas o biseladas. Estas bolas son decorativas y acostumbran a tener un estilo retro y vintage

Para sujetar las bolas de cristal en nuestra lámpara existen dos sistemas, los muelles y los portabolas. Los primeros son para bolas sin cuello; los segundo para bolas que lleven cuello. Cualquiera de los dos es igualmente eficaz, si bien el primero es estéticamente más cuidado, al respetarse la forma esférica de la bola o globo.

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